A este carancho lo veo parado en el poste volviendo de una tarde fotográfica y ya bajando el sol.
Trato de acercarme, se corre. Me vuelvo a acercar y se vuelve a correr. Esta es una de las varias tomas con el fondo del campo en amarillo y la meseta patagónica por encima.
Un abrazo.
La verdad que impecable el carancho y la luz.
Lo que te quedo bárbaro ese ese fondo haciendo juego con el cogote y la cabeza del carancho, tienen los mismos colores, jeje.