Y llegaron las 600! ese número que parecía tan lejano y difícil de alcanzar luego de aquella foto del lechuzón mocho que subí a principios de mayo.
Gracias a los viajes que encaré este año y a pesar de las complicaciones que hubo que afrontar (permisos, testeos, etc.), el objetivo de a poco se hizo tangible.
Ya vino una juntada con amigos, días atrás para despedir el año, donde mencionamos que estaría bueno hacer un viaje a Ceibas para cerrar el 2021.
De mi parte, accedí de inmediato, estaba latente la posibilidad de lograr conocer y fotografiar al Tordo Amarillo, una especie símbolo de la lucha para torcer el camino de la extinción.
Fue así que con alguna idas y vueltas hasta último momento, pudimos armar un viaje de 3 días al sur entrerriano, tan nombrado y que yo que iba a pisar por primera vez.
Gracias a los datos aportados por fotógrafos amigos (Andrés Bianchi y Esteban Argerich) logramos dar con una colonia ya con pichones volantones.
Realmente son unos pájaros espectaculares, no solo por su colorido sino por la manera en que se brindaban para las fotos.
Era para quedarse todo el día con ellos, pero por supuesto, debíamos respetar su privacidad y tan solo destinar el menor tiempo posible para lograr las imágenes soñadas.
Mas allá del número, que para muchos no es importante, este "juego" de sumar especies sirve para impulsar mi inquietud viajera, para no conformarme con el mismo horizonte y las mismas aves todos los días.
Es un desafío personal poder llegar a lugares que nunca había conocido, padecer calor, frío, incomodidades...pero volver siempre con anécdotas y una sonrisa muy grande por las experiencias vividas.
Al menos para mi, de eso se trata
A mano alzada, recorte para pasar a vertical, revelado en Lr.
Agradezco a los que pasan a visitar y dejar su opinión y me gusta, saludos!